Jesús se encuentra en un spa con Óscar y una mujer mayor, Amparo, que parece su madre pero que en realidad es su novia y está a punto de meter la pata, pero no avisa a Nuria sobre quién es la mujer. Jesús, a continuación se va a hacer un masaje pensando que éste tiene final feliz y así se lo hace saber a la masajista, lo que provoca que le acaben echando del centro. Más tarde se reúnen con todos en una cafetería cercana y cuando llega la hora de pagar Jesús se hace el remolón y acaba pagando Amparo, ante lo que Nuria dice: "Jesús, no irás a dejar que pague la madre de Óscar"